En la actualidad, llevar un piercing en la lengua se considera una forma de arte corporal, una expresión social o incluso una mejora de la imagen personal. Sin importar cuál sea tu motivo para tener un piercing, es crucial que tomes medidas para mantener una buena salud bucodental y cuidar tu bienestar en general.
En los últimos tiempos, las perforaciones en la lengua han ganado popularidad entre la juventud como una tendencia estética en aumento. Estos piercings, que se ubican tanto de forma vertical como horizontal en la lengua, vienen acompañados de una serie de complicaciones que pueden afectar tanto a corto como a largo plazo.
Una evidencia innegable del resurgimiento de la popularidad de esta tendencia es el hecho de que los hashtags #tonguepiercing (piercing en la lengua) y #tonguepiercings (piercings en la lengua) acumulan más de 790 millones y 520,000 visitas, respectivamente, en las plataformas de redes sociales TikTok e Instagram.
Lo que debes saber si te quieres colocar un piercing en la lengua
Es fundamental buscar un establecimiento especializado para llevar a cabo la perforación en la lengua. Este procedimiento debe ser realizado por un profesional que siga estrictos protocolos de esterilización y higiene con el fin de minimizar los riesgos y prevenir posibles complicaciones en el futuro. Además, es esencial que el lugar cumpla con todos los requisitos de sanidad correspondientes.
Es recomendable que sea de titanio ya que es uno de los materiales más biocompatibles que existen con el cuerpo humano. Esto provoca que facilita la cicatrización. Además, es hipoalergénico, liviano y puede fabricarse en una gran variedad de colores.
¿Una vez puesto que debo hacer?
Para ayudar a la cicatrización, se recomienda dieta blanda y fría, pudiendo aplicar frío si se produce inflamación. Si existen síntomas de infección debes acudir al dentista para que valore debidamente tu caso.
La higiene desempeña un papel crucial en el proceso de cicatrización. Para prevenir posibles infecciones, es imprescindible mantener una estricta rutina de limpieza bucodental. Esto implica cepillar tus dientes y lengua después de cada comida y utilizar un enjuague bucal sin alcohol que ayude a eliminar los residuos de comida y las bacterias presentes en la boca.
Los problema principales que se puede dar al realizarse un piercing son:
- Infecciones.
- Hemorragias prolongadas.
- Dolor, inflamación y entumecimiento de la lengua.
- Dientes astillados o rotos debido al continuo golpeo del pendiente con la superficie de las piezas dentales.
- Retracción de las encías
El periodo de cicatrización de una perforación de la lengua suele tener una duración aproximada de 6 semanas.
Si ya lo llevas, es importante que sigas nuestros consejos para prevenir futuros problemas.
- Evita el juego con la joyería. Intenta no jugar o forzar el piercing contra la encía o las piezas dentales.
- Limpiarlo cuidadosamente y prestar atención a posibles signos de inflamación. En caso de notar cualquier complicación acude al especialista.
- Buena rutina de higiene bucal. Cepillar los dientes después de cada comida, utilizar limpiadores de placa y seda dental. No olvides que la higiene no debe de ser solo en las piezas dentales, también en la lengua, paladar y encías.
- Visita al dentista. Una visita a tu dentista para que evalúe el estado de tu boca evitará posibles sustos.
En resumen, los piercing dentales pueden ser una manera elegante y personalizada para decorar los dientes, pero no son recomendables desde el punto de vista de la odontología. Tienen múltiples riesgos que, si se toman en cuenta a largo plazo, pueden tener consecuencias en la salud bucal.
En nuestra Clínica en Barcelona te asesoramos y daremos las pautas necesarias para que la colocación de un piercing sea meramente cuestión de estilo y moda, y que no te provoque ningún tipo de complicación.
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